Marco Antonio Zárate Mancha.
La Dulce Vero
Llueve, evoco a la dulce Vero, la que al mirar a los ojos estrujaba el alma La tímida neblina abraza a la montaña
Eres luz que roba fuerza a la mañana
Eres belleza que resta gracia a las flores Eres labios de pétalos en flor que se abren al primer quejido de luz matinal
