Por Claudia Gómez Montealvo.
Siempre hablamos y escribimos sobre futbol, política, religión o espectáculos, pero pocas veces hablamos o profundizamos sobre la gente común, aquella que siempre tiene una historia interesante que contar.
A la gente le intriga saber la vida de X o Y actriz, actor o cantante, si el América ganó o perdió, si hay misa el sábado o se cancela por la Covid-19. Esas noticias venden, hay mercado y siempre habrá quien lo consuma mientras el público, espectador o “la gente” (para generalizar) le interese esos contenidos.
Sin embargo, nunca nos ponemos a pensar o reflexionar que nuestros vecinos, familiares y amigos tienen una historia de vida y suele ser tan interesante en muchos sentidos, puede ser de lucha ante la adversidad, de fracasos, logros, amor y desamor.
Conversando en una reunión con mis cercanos sobre sus familias, sus padres y el por qué ellos decidieron casarse, descubrí que cada historia es única. Una de las chicas me decía que nunca conoció a su padre y que su madre había tomado la determinación de ser madre soltera y desafiar muchos obstáculos a los que se enfrentó en la Ciudad de México. Hoy en día su madre es una doctora muy reconocida en el campo de la Medicina.
Otra chica me decía tristemente que sus hermanos y ella sentían que sus padres nunca se habían amado, y que ellos nunca fueron producto del amor, eran productos de las circunstancias, porque la madre, doña Lucia constantemente decía que tuvo que casarse con su pareja para escapar de los apuros económicos en casa.
Esa historia me impactó por lo que transmitía la chica al momento de relatar, era tal su tristeza que se me hacía un nudo en la garganta, su mirada al vacío y la tristeza que reflejaba al hablar sobre sus padres me perturbaron. Para reconfortar a la chica yo le respondía que en algún momento sus padres se amaron, tuvieron sus momentos de felicidad y que por alguna razón decidieron tener hijos.
Esta clase de historias me hicieron reflexionar sobre la vida de las personas, aquellas historias no contadas, de las que podemos escribir, reflexionar y sentir. Historias de la vida cotidiana que forman parte de nuestro andar.
A partir de esa reunión me intrigó continuar preguntando sobre aspectos muy particulares de las personas y descubrí que hay mucho que decir y escribir de la GENTE COMÚN. Solo conocemos la cubierta, el cascarón de las personas, y el profundizar y llegar a la intimidad del ser resulta emocionante e intrigante pues cada historia evoca aromas, épocas, circunstancias y diversidad de sentimientos.
Claudia Gómez Montealvo
Estudios de Postgrado en Ciencia Política, Universidad de Oxford, Inglaterra.
Maestra en Administración y Políticas Públicas por el Colegio de San Luis, A.C.
Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
Estudios en Derecho por la Universidad del Centro de México.
Asesora de Gobiernos federales, estatales y municipales.
Consultora de diversas legislaturas del Congreso del Estado de San Luis Potosí.
Activista de diversos colectivos y asociaciones civiles, con enfoque en derechos humanos, prevención del delito, mujeres, cultura y educación.
