Por redacción.
“Radiografía de un país que mata a sus mujeres: 17.776 asesinadas en cinco años”, así fue la cabeza del reportaje del diario El País, certera y dura, casi un editorial que da cuenta de una maldita realidad por la que atraviesa nuestro país y que parece que a muchos, sino es a casi todos los encargados de la seguridad pública en México, de la educación y de la dirección del mismo, le tiene sin cuidado.
El artículo apunta, nuevamente con cifras, con datos, que “El 70% de las mexicanas ha sufrido algún tipo de violencia a lo largo de su vida y 50.000 han sido agredidas físicamente desde 2018 en una lacra que no da tregua”.
Cita diversos acontecimientos o feminicidios que han acontecido y que, como cada día, sacuden al país: “Son 17.776 asesinadas desde 2018, más de 3.500 cada año, 300 al mes, 10 al día. Según los datos del INEGI…”.
Califica lo que llama la radiografía dela violencia contra las mujeres como en México como “desoladora”, acertado cuando leemos los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema nacional de Seguridad Pública, que cita el País en el escrito de Beatríz Guillén, donde “…en los primeros nueve meses de 2022, 2.831 mujeres han muerto de forma violenta, 50.000 fueron agredidas físicamente, casi 2.000 fueron violadas, 497 fueron víctimas de trata, 120 fueron secuestradas y 258.700 hicieron llamadas al servicio de emergencia por estar siendo violentadas”.
En este año se registran, según la Secretaría de Seguridad, se han contabilizado 695 de enero a septiembre y los considera como feminicidios que es el asesinato por razones de género. Y los homicidios intencionados, los denominados dolosos alcanzan los 2,136, y de estos ¿cuántos serían feminicidios?.
Y todos aquellas agresiones que no son denunciadas, en donde el silencio es el dominante si se toma en cuenta que , como cita Guillén en su análisis, “El silencio es abrumador: el 90% de las mujeres que sufrió violencia escolar, laboral, comunitaria, familiar o de su pareja no presentó una denuncia. En números hay 48 millones de mexicanas mayores de 15 años que sufrieron violencia física o sexual y no dijeron nada, según el Inegi”.
Así el país de la 4T, el del “cambio”, el de la marcha, el de las matutinas que cita y da otros datos mientras las mujeres viven la violencia, mueren a manos de un cercano o un depredador. Pero parece que eso no es importante, como no lo fue el 25 de noviembre.
La realidad es que en México mueren, matan, asesinan a diez mujeres cada día y muchas de ellas con crueldad desmedida, con odio. El Feminicidio avanza, sí es desolador el panorama, triste, doloroso, lastima, da pena, aflige, desgarra y causa una gran angustia. Y como cambiarlo, solo educando, ES DONDE HAY QUE INVERTIR EN LA EDUCACIÓN.
Con info del elpaís.com
