Por Redacción.
“México deberá trabajar para dar certidumbre, implantar una política económica que genere credibilidad y confianza”, para lo cual deberá existir una certeza jurídica y en cambio de reglas, sobretodo en el sector energético.
El crecimiento del país será beneficiado, como a nivel mundial, por la aportación al crecimiento mundial que generen economías como la China y los Estados Unidos.
Si bien las expectativas de crecimiento de la economía de México la ubican los especialistas entre el 5 y 6%, se debe tomar en cuenta que venimos de una debacle que no se había presentado desde hace 90 años. Una contracción de -8.5%, menos ocho punto cinco puntos.
Por lo anterior cualquier crecimiento se verá espectacular, de tal forma se espera que el empleo, la producción industrial y consumo crezcan, pero la comparativa no debería de realizarse con las cifras del año anterior, cuando la mayor parte del sector productivo estuvo casi detenido en su totalidad por la pandemia, por tanto algo más certero sería una comparación con las cifras del año 2019 o el 2018.
Por lo pronto el riesgo de inflación para el presente año seguirá latente ya que, según los analistas, esta podría cerrar el año por encima de los 5 puntos muy por encima del objetivo de BANXICO que la ubica en 3% +/- 1. En el mes de abril se ubicó en 6.08 y en mayor bajó a 5.89%.
De tal forma que es positivo que el crecimiento de mayo sea del 24.8% como lo ubicó el INEGI, respecto al año pasado, pero no podemos engañarnos cuando vemos el resto de los indicadores y además sabemos que la economía nacional estuvo casi parada el año pasado.
Por lo anterior es importante que si se van a dar cambios en leyes y se pondrán nuevas reglas estas de confianza a los inversionistas y no se engañe con un discurso de ilusión inexistente.
Con información de Reuters, Economista, Financiero, Expansión
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