ERAN LAS SIETE…

Por Pablo Neruda

Eran las siete y media
del otoño
y yo esperaba
no importa a quién.
El tiempo,
cansado de estar allí conmigo,
poco a poco se fue
y me dejó solo.
Me quedé con la arena
del día, con el agua,
sedimentos
de una semana triste, asesinada.

Deja un comentario