Por David Medrano.
Cualquiera que gane la elección por la gubernatura de SLP, en los próximos comicios, tendrá que encarar la presión de pago que representa la deuda pública bancaria, y el severo problema de seguridad que se ha incrustado en tres delitos que desde el año pasado, marcan una tendencia creciente: el homicidio doloso, el feminicidio, y el narcomenudeo.
El reporte más actualizado de la Cuenta Pública entregado en marzo de este año, refiere que la deuda bancaria tiene un saldo de 3 mil 743 millones de pesos.
El gobierno que inicie funciones en el mes de septiembre, deberá cubrir la parte proporcional del pago de 179.1 millones de pesos, comprometido para el 2021.
En el año 2022 ese compromiso ascenderá a 163.8 millones de pesos; en 2023 a 98 MDP; en 2024 a 112.2 MDP; en 2025 a 128.3 MDP; en 2026 a 146.9; y en 2027 a 168.1 MDP.
A esos pagos deben agregarse los que corresponden al costo financiero de la deuda, correspondientes a pago de intereses y gastos inherentes.
A la presión que representa la deuda pública bancaria, se añade la indirecta relacionada con pagos a proveedores y acreedores.
En el actual proceso electoral nueve son los candidatos postulados por los diferentes partidos políticos y la vía independiente, que compiten en la elección por la gubernatura de SLP de junio de este año.
Por la presión que representó la atención a la epidemia de COVID, el actual gobierno planteó sin lograrlo hasta ahora, una nueva reestructura de la deuda pública bancaria, o la venta del terreno Ford de propiedad estatal (valuado en mil 200 millones de pesos), con la finalidad de oxigenar las finanzas estatales.
El otro problema que aqueja a SLP, es el de la inseguridad, en un año de transición, se arrastra desde el 2020 una inercia en delitos de impacto social.
Las cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública refieren que en el bimestre de enero – febrero de 2021 fueron cometidos 111 homicidios dolosos. En el mismo período pero del año anterior hubo 82.
Lo alarmante de las cifras se inscriben en la composición de ese delito, en ese lapso de este año, 81 personas murieron por disparos de arma de fuego, en varios casos, corresponden a muertes asociadas con operaciones de la delincuencia organizada.
Para el bimestre enero – febrero de 2020, por esa causa, murieron 49 personas.
Además de ese delito, SLP enfrenta una vorágine por una constante del narcomenudeo.
Las cifras del SNSP marcan que en ese bimestre de este año, han sido abiertas 200 carpetas de investigación. En 2020, fueron 209.
Con la misma constante trágica, es reportado el delito de feminicidio, el mismo periodo, seis cometidos en 2020, y la misma cantidad en este año de elecciones.
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